Historias de mi familia de receta en receta. Quería escribir las recetas de la familia (esas que me dictó mi madre y guardo con cariño en mi libreta) y decidí empezar este blog. La cocina guarda un poquito de nuestra historia. El día de Navidad el puchero y els pastissets de boniato, en San Vicente las cocas de Sachí...toda la familia alrededor de la mesa compartiendo alegría. Mi libreta ha ido creciendo con recetas de amigas y blogs de otras personas que disfrutan como yo entre fogones.
martes, 30 de agosto de 2011
TELLINAS CON TOMATE
INGREDIENTES
Para cuatro personas
Medio kilo de tellinas
200 grs. de tomates
1 cebolla
1 diente de ajo.
PREPARACION
Rallar la cebolla y cortar el diente de ajo muy pequeño. Pochar en una cazuelita de barro a fuego lento y cuando ya esté casi transparente añadir el tomate rallado y añadir la sal. Cuando ya esté casi hecho (veremos como el aceite sube a la parte de arriba, añadimos una cucharada de azúcar para eliminar el ácido. Poner las tellinas y dejar que se abran. Servir calentitas y a disfrutar
HISTORIA
Al malcomiente y a su hermana les encantan las tellinas. En verano, en el Perelló somos consumidores compulsivos, todos los sábados y domingos compramos clóchinas y tellinas y las preparo para aperitivo, y como me descuide ni las pruebo.
Si te levantas temprano es una delicia ver las barcas de arrastre pasar hacia el puerto con la captura. Un año a Juan le regalaron un rastrillo para pescarlas. Yo pensaba que iba a sacar un puñadito, pero cuando vació el rastrillo sobre la toalla y empezamos a separar conchas vacías había un montón y era un lujo verlas. Es una pena porque luego prohibieron pescar con rastrillo y ahora las sacamos de la arena con las manos y tal como las sacamos nos las comemos crudas, con su sabor impresionante a mar. Es curioso ver por la orilla como muchas personas hunden el dedo del pie en la arena de la orilla, notan algo y enseguida con la mano cogen su captura introduciéndola en un cubito con agua.
Normalmente las hago en la paella con un chorritón de aceite de oliva virgen extra y unas gotitas de limón, pero esta receta es de la abuela Rosa y están impresionantes. Nos ha contado que tenía que hacer unas pocal con aceite y ajito para el tío Nacho y con tomate para el papi. ¡menos mal que no eran cinco hermanos porque le hubiera tocado hacerlas de cinco maneras distintas! por supuesto no hay que olvidarse del pan para sucar.
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sábado, 27 de agosto de 2011
TEMPURA DE BERENJENA CON REDUCCION DE MOSCATEL
INGREDIENTES
1 Berenjena
1 yema de huevo
60 grs. de harina
10 grs. de harina de maíz
Sal
125 ml. de agua muy fría
Aceite de girasol para freír.
250 ml. de vino de moscatel
75 ml. de azúcar
PREPARACION
Preparar la reducción: Colocar en un cazo el moscatel y el azúcar y dejar que hierva a fuego suave hasta que vemos que se forma un almíbar. Colocar en un ‘biberon’ (Yo aprovecho las botellas de reducción de vinagre de Módena cuando se acaban) y dejar enfriar.
Pelar la berenjena. Cortarla a bastoncitos y espolvorear con sal. Dejar que repose mientras preparamos la témpura.
Batir bien las yemas en un bol. Incorporar las harinas tamizadas (pasadas por un colador. Sazonar con sal y pimienta y añadir poco a poco el agua removiendo enérgicamente para que no forme grumos.
Calentar en una sartén abundante aceite de girasol e ir pasando los bastoncitos por la témpura y friendo por tandas, poco a poco para que no se peguen. Retirar con una espumadera
HISTORIA
Estaba esperando que llegara el viernes 08 de Julio porque un labrador de El Perelló que vende su propia cosecha me dijo que ese día cogería las primeras berenjenas. Las quería gastar pronto y tenía ganas de hacerlas fritas con miel. Como tenía reducción de moscatel que había hecho para otra receta pensé en hacer esta variante y al no tener harina de témpura ya comprada me acordé que en una revista venía la receta con una yema.
Al venir de la playa nos apetecía comer más ligero, ya que la noche anterior habíamos cenado con los amigos y nos pasamos y bueno, muy ligero no es que fuera, pero por lo menos comimos de picar o de capricho y vimos como ganó Alonso el gran premio de Silverston en Inglaterra.
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1 Berenjena
1 yema de huevo
60 grs. de harina
10 grs. de harina de maíz
Sal
125 ml. de agua muy fría
Aceite de girasol para freír.
250 ml. de vino de moscatel
75 ml. de azúcar
PREPARACION
Preparar la reducción: Colocar en un cazo el moscatel y el azúcar y dejar que hierva a fuego suave hasta que vemos que se forma un almíbar. Colocar en un ‘biberon’ (Yo aprovecho las botellas de reducción de vinagre de Módena cuando se acaban) y dejar enfriar.
Pelar la berenjena. Cortarla a bastoncitos y espolvorear con sal. Dejar que repose mientras preparamos la témpura.
Batir bien las yemas en un bol. Incorporar las harinas tamizadas (pasadas por un colador. Sazonar con sal y pimienta y añadir poco a poco el agua removiendo enérgicamente para que no forme grumos.
Calentar en una sartén abundante aceite de girasol e ir pasando los bastoncitos por la témpura y friendo por tandas, poco a poco para que no se peguen. Retirar con una espumadera
HISTORIA
Estaba esperando que llegara el viernes 08 de Julio porque un labrador de El Perelló que vende su propia cosecha me dijo que ese día cogería las primeras berenjenas. Las quería gastar pronto y tenía ganas de hacerlas fritas con miel. Como tenía reducción de moscatel que había hecho para otra receta pensé en hacer esta variante y al no tener harina de témpura ya comprada me acordé que en una revista venía la receta con una yema.
Al venir de la playa nos apetecía comer más ligero, ya que la noche anterior habíamos cenado con los amigos y nos pasamos y bueno, muy ligero no es que fuera, pero por lo menos comimos de picar o de capricho y vimos como ganó Alonso el gran premio de Silverston en Inglaterra.
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martes, 23 de agosto de 2011
SALADITOS Y ROSQUILLETAS CON PIMENTÓN
INGREDIENTES
150 grs. de harina de fuerza
150 grs. de harina normal.
1 cucharadita de levadura de panadería seca
½ cucharadita de sal
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de orégano
1 cucharada de pimentón.
160 ml. de agua caliente
PREPARACION
Mezclar y amasar todos los ingredientes. Según la harina puede necesitar más o menos agua, por lo que vale la pena no echarla de golpe e ir incorporándola poco a poco.
Cuando conseguimos una masa elástica la dividimos en dos y en una de las partes añadimos el pimentón y el orégano. Volvemos a amasar hasta que se mezclan los nuevos ingredientes y dejamos reposar tapado en un lugar templadito por al menos una hora.
Pesamos las masas por separado y la dividimos en diez trozos. Formamos las rosquilletas con las manos y las dejamos levar 15 minutos más.
Los pintamos con una pincel mojado en agua ligeramente salada y horneamos unos 20 minutos a 200º
HISTORIA
En casa no faltan los saladitos. De Velarte o Anitín, dos marcas valencianas de confianza. Juan no concibe tomar ensaladilla sin saladitos y siempre vienen bien para picar a cualquier hora.
En la libreta de recetas de Rosa había una receta de rosquilletas que pronto copié a la mía. Claro que ponía “veinte pesetas de levadura” y yo he puesto una cucharadita y han salido bien. Me hubiera gustado tener llavoretes, como llevan las auténticas rosquilletas pero no me acordé de comprar.
Las rosquilletas con llavoretes son de las primeras cosas que les das a los niños para que se entretengan y con horchata están buenísimas!
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150 grs. de harina de fuerza
150 grs. de harina normal.
1 cucharadita de levadura de panadería seca
½ cucharadita de sal
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de orégano
1 cucharada de pimentón.
160 ml. de agua caliente
PREPARACION
Mezclar y amasar todos los ingredientes. Según la harina puede necesitar más o menos agua, por lo que vale la pena no echarla de golpe e ir incorporándola poco a poco.
Cuando conseguimos una masa elástica la dividimos en dos y en una de las partes añadimos el pimentón y el orégano. Volvemos a amasar hasta que se mezclan los nuevos ingredientes y dejamos reposar tapado en un lugar templadito por al menos una hora.
Pesamos las masas por separado y la dividimos en diez trozos. Formamos las rosquilletas con las manos y las dejamos levar 15 minutos más.
Los pintamos con una pincel mojado en agua ligeramente salada y horneamos unos 20 minutos a 200º
HISTORIA
En casa no faltan los saladitos. De Velarte o Anitín, dos marcas valencianas de confianza. Juan no concibe tomar ensaladilla sin saladitos y siempre vienen bien para picar a cualquier hora.
En la libreta de recetas de Rosa había una receta de rosquilletas que pronto copié a la mía. Claro que ponía “veinte pesetas de levadura” y yo he puesto una cucharadita y han salido bien. Me hubiera gustado tener llavoretes, como llevan las auténticas rosquilletas pero no me acordé de comprar.
Las rosquilletas con llavoretes son de las primeras cosas que les das a los niños para que se entretengan y con horchata están buenísimas!
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domingo, 21 de agosto de 2011
GARBANZOS CON CEBOLLA Y TOMATE
INGREDIENTES
Para dos personas
150 grs. de garbanzos ya cocidos.
1 cebolla pequeña
1 tomate de pera
1 cucharada de almendra molida
1 diente de ajo
sal, pimienta y aceite de oliva
PREPARACION
Rallar la cebolla o cortarla a cuadraditos pequeños. Ponerla en una sartén con aceite de oliva y el diente de ajo cortado pequeñito. Cuando esté transparente añadir el tomate de pera que habremos pelado, quitado las pepitas y cortado también en cuadraditos. Salpimentar y añadir una cucharada de almendra molida o almendras picadas en el mortero. Dorar un minuto la almendra, añadir los garbanzos y dar unas vueltas hasta que tomen el sabor.
HISTORIA
Tenía un puñado de garbanzos de un cocido de hace no se cuantos meses en el congelador. Ahora estoy en campaña de gastar todo lo que hay en el mismo, para vaciarlo y empezar septiembre con todo nuevo, y al ver esta receta en una revista, la tuneé algo y decidí hacerla.
Podemos decir que eran estos unos garbanzos abuelos, de tanto tiempo que los tenía, y me vienen a la cabeza las amigas de la abuela Rosa. Mi hijo un día le dij:. –Abuela me ha dicho una amiga tuya que bajes. Ella le preguntó:
-¿Quién? Y muy serio le contesta. -¡la que huele a churros!.
Otro día le hablaba de otra y al preguntar la abuela a quien se refería contestó –Esa muy arrugada que siempre lleva gafas de sol y tiene el pelo amarillo.
Le tuve que reñir y decirle que tuviera más respeto, pero por dentro me partía pensando quien estaría más arrugada que las demás.
Espero llegar a ser como ellas, muy arrugada, pero contenta y rodeada por las tardes de un montón de amigas que juegan a las cartas y se cuentan anécdotas de los nietos.
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miércoles, 17 de agosto de 2011
ARROÇ EN SEBA I ABAECHO (ARROZ CON CEBOLLA Y BACALAO)
INGREDIENTES
Para cuatro personas
400 grs. de arroz
1200 ml. de agua.
1 cucharada de carne de ñora
125 grs. de bacalao inglés
Media sepia
2 cebollas grandes
Aceite de oliva y sal
PREPARACION
Cortar la cebolla bien pequeñita. Echar en la paella AOVE (Aceite de oliva virgen extra) y sofreír bien a fuego lento. Cuando ya esté transparente echar la sepia cortada a trocitos y cuando ya le hemos dado una vuelta la carne de ñora y el bacalao desmigadito.
Echar el agua que ya tendremos hirviendo, un poco de colorante alimentario y cuando empiece a hervir contar de 18 a 20 minutos. Los primeros cinco a fuego vivo y luego bajarlo. Rectificar de sal después de los cinco primeros minutos porque como lleva el bacalao es probable que no lo necesite.
HISTORIA
Hace años (no digo cuantos porque lo he contado y me he quedado fría, pero era 1994) estuve trabajando en Favara. Como los jueves trabajábamos por la tarde, venían compañeros de los pueblos de alrededor y comíamos juntos. La mayoría de veces íbamos al Restaurante Sol, que está en la carretera. Su magnífica cocinera, Amparín, nos preparó un día este arroz. Cada jueves nos hacía algo diferente como la espardenyà y la paella, que en la zona la hacen con pelotitas Tengo que pasar un día, no se si aún estarán Ángel y Amparín en el bar.
Lo pasé muy bien la temporada que estuve allí. Comprobé que no existía la prisa, y me gané el cariño del pueblo.
A veces llegaba una señora y me decía.-¡pren chiqueta que els acabe de comprar! (curasanes o pastas)contestaba yo.- ¡pero si ja he esmorzat!
Y la señora insistía:- Che, pren i voràs que estàn acabaets de fer (1). No fue una etapa muy buena para ponerse a régimen….
Recuerdo una vez cuando vino un vecino que era camionero y no estaba mucho por allí. El patio estaba lleno de señoras y él entró y con su simpatía quiso decirme un piropo.
-¡Mírala! Dijo ¡la perla més bonica de Favara!
A continuación se oyó un murmullo de desconcierto y enojo, las mujeres estaban enfadadísimas y decían
-¡será posible! li ha dit la més bonica de Favara ¡ A una forastera!
Él sólo quería hacer un cumplido, pero yo siempre sonrío cuando me acuerdo de la situación tan incómoda que se creó.
(1) Ten chica que están acabaditos de hacer, Pero si ya he almorzado! Che, toma y verá que están acabaditos de hacer
(2) Mírala, la perla más bonica de Favara. Le ha dicho la perla más bonica de Favara a una forastera
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sábado, 13 de agosto de 2011
GALLETAS DE QUESO
INGREDIENTES
100 grs. de harina
100 grs. de mantequilla
100 grs. de queso tierno
60 grs. de queso gorgonzola
1 yema de huevo
Sal y pimienta de colores
PREPARACION
Mezclar los ingredientes. La mantequilla debe estar a temperatura ambiente o si la acabas de sacar como me ha pasado a mí , la he rallado junto con el queso. Amasar y formar una bola y dejar reposando en el frigorífico por al menos una hora.
Dividir en doce partes , hacer una bolita con cada una y luego formar la galleta.
Precalentar el horno a 200º y al meterlas bajarlo a 180 y hornear por más o menos 20 minutos hasta que estén hechas.
HISTORIA
Hay una frase que dice me la han dado con queso! Y esto es lo que me ha pasado. Cuando me apunté a piscina con mi hija pensé que era una buena ocasión para compartir momentos con ella y contarnos nuestras cosas por el camino. Pero allí pronto conoció a una amiga….y si al principio nos esperábamos y comentábamos como nos había ido la clase, luego me hacía una seña indicando que se iba con la amiga a la otra piscina o me pedía que la esperara fuera. Y yo la esperaba allí solita, con mi bolsa, y la veía reírse tan contenta cuando salía con su amiga charlando sintiéndose tan mayor. Veo como se aleja de mí y me pregunto donde estará aquel bebé con ricitos y lazos de colores.
Se ha convertido en toda una preadolescente de 11 años y no quiero ni pensar lo que me espera…pero lo pasaremos cpmp sea y disfrutaremos de esta nueva e inquietante etapa que inicia tomándonos unas galletitas de queso.
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miércoles, 10 de agosto de 2011
TALLARINES AL PESTO ROJO
INGREDIENTES
Para cuatro personas
400 grs. de espaguetis.
6 hojas grandes de albahaca
25 grs. de piñones naturales
1 diente de ajo mediano
25 grs. de queso parmesano rallado
75 cl. de aceite de oliva virgen
50 grs. de tomates secos en aceite
4 aceitunas negras
3 cucharadas soperas de agua
1 o dos guindillas (si gusta picante)
PREPARACION
Preparar el pesto.
Batirlo todo con la batidora menos el queso que incorporaremos poco a poco removiendo con la cuchara. Si hacemos el doble y queremos conservarlo en la nevera, guardarlo en un tarrito añadiéndole dos cucharadas de aceite de oliva por encima.
Colocar una olla al fuego con abundante agua y cuando hierva a borbotones echar los espaguetis. Cocerlos los minutos que indique el fabricante y escurrirlos.
Servirlos en el plato acompañado del pesto y adornados con unas hojas de albahaca.
HISTORIA
Los que comemos bien en casa a veces lloramos cuando comemos en un bar. Tal y como yo lo veo no es una cuestión de tacañería si no de la relación precio-calidad, y hablo de la calidad como la diferencia que existe entre lo que esperas recibir y lo que realmente recibes.
Si vas a Italia esperas comer, como no, la mejor pasta del mundo, y cuando te sientas y pides y la pasta lleva cocida horas y los fruti di mari saben a Avecrem y a la hora de pagar te soplan lo que te soplan... Pues eso que se te ponen ganitas de llorar.
Menos mal que en Pisa ha pasado justo lo contrario. Comimos en una espaguetería y pedimos unos ñoqui y unos espagueti al pesto…. ¡Deliciosos! la pasta estaba cocida al dente, en su punto, con esa textura difícil de encontrar y la salsa me pareció exquisita. Yo nunca había hecho pesto, había comprado algún tarro ya hecho y me parecía ni fu ni fa. Este pesto estaba tan bueno que sólo faltó que nos comiéramos el plato . Me apunte la receta hace tiempo para aprovechar unos tomates secos que compré y estaba buenísimo. (La saqué de internet y no recuerdo la pag. Si alguien lo sabe que me lo indique y pondré el link. Gracias)
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sábado, 6 de agosto de 2011
PASTELITOS DE ACELGAS
INGREDIENTES
Para la masa
1 Vaso de agua (250 cc.)
1 vaso de aceite de oliva
1 pellizco de sal
La harina que admita (aprox. 500 gr. De fuerza y 200 grs. de maíz)
Para las acelgas
200 grs. de acelgas ya cocidas
1 huevo duro
1 cebolla tierna
150 grs. de trocitos de jamón serrano.
1 puñadito de piñones
PREPARACION
Para la masa
Ponemos el agua, el aceite y la sal en un bol. Echar la harina (dejar un poca sin poner hasta ver como va la masa, ya que cada harina coge más o menos líquido). Ir removiendo y amasando con las manos hasta que quede una masa elástica y que no se pegue a las manos. Dejar reposar un ratito (aunque no hace falta al no llevar levadura)
Preparar el relleno.
Sofreír la cebollita. Cuando ya esté pochada añadir las acelgas (que ya tendremos escaldadas) y dar unas vueltas añadiendo la sal. Cortar el huevo cocido pequeñito y añadirlo junto con los trocitos de jamón. Dar otra vuelta y sacar del fuego.
Aplanar la masa con el rodillo. Con un cuchillo o un molde cuadrado cortar cuadrados de masa que colocaremos sobre la mano.
Coger una cucharada de relleno y extenderlo a lo largo.
Cerrar los dos extremos hacia el centro y sellar los bordes con un tenedor.
Colocarlos en la bandeja del horno. Batir una yema y pintar los bastoncitos con un pincel.
Introducir al horno a 200º hasta que los vemos dorados.
HISTORIA
A veces no sabemos que regalar y para las que nos gusta la cocina una bandeja bien presentada con empanadillas puede ser una buena opción (aunque corramos el peligro que nos apoden Encarna la de las empanadillas).
También resultan buenísimas para una cena de verano, un montón de pastelitos y empanadillas variadas de diversos sabores y un tinto de verano. Aunque en verano da bastante pereza encender el horno.
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Para la masa
1 Vaso de agua (250 cc.)
1 vaso de aceite de oliva
1 pellizco de sal
La harina que admita (aprox. 500 gr. De fuerza y 200 grs. de maíz)
Para las acelgas
200 grs. de acelgas ya cocidas
1 huevo duro
1 cebolla tierna
150 grs. de trocitos de jamón serrano.
1 puñadito de piñones
PREPARACION
Para la masa
Ponemos el agua, el aceite y la sal en un bol. Echar la harina (dejar un poca sin poner hasta ver como va la masa, ya que cada harina coge más o menos líquido). Ir removiendo y amasando con las manos hasta que quede una masa elástica y que no se pegue a las manos. Dejar reposar un ratito (aunque no hace falta al no llevar levadura)
Preparar el relleno.
Sofreír la cebollita. Cuando ya esté pochada añadir las acelgas (que ya tendremos escaldadas) y dar unas vueltas añadiendo la sal. Cortar el huevo cocido pequeñito y añadirlo junto con los trocitos de jamón. Dar otra vuelta y sacar del fuego.
Aplanar la masa con el rodillo. Con un cuchillo o un molde cuadrado cortar cuadrados de masa que colocaremos sobre la mano.
Coger una cucharada de relleno y extenderlo a lo largo.
Cerrar los dos extremos hacia el centro y sellar los bordes con un tenedor.
Colocarlos en la bandeja del horno. Batir una yema y pintar los bastoncitos con un pincel.
Introducir al horno a 200º hasta que los vemos dorados.
HISTORIA
A veces no sabemos que regalar y para las que nos gusta la cocina una bandeja bien presentada con empanadillas puede ser una buena opción (aunque corramos el peligro que nos apoden Encarna la de las empanadillas).
También resultan buenísimas para una cena de verano, un montón de pastelitos y empanadillas variadas de diversos sabores y un tinto de verano. Aunque en verano da bastante pereza encender el horno.
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miércoles, 3 de agosto de 2011
CALDERETA DE RAPE DE PEPE
INGREDIENTES
3 cebollas
2 pimientos
½ kilo de aros de calamar
2 kilos de rape
1 kilo de emperador
4 ñoras
1 kilo y medio de langostinos
½ kilo de gambas peladas
5 Ajos
2 rebanadas de pan duro
150 grs. de avellanas
Perejil
4 litros de caldo de pescado (receta aquí)
½ kilo de chirlas
2 kilos de patatas
1 bote de tomate triturado de medio kilo.
(Para 12 personas)
PREPARACION
Hidratar las ñoras. Cortar la cebolla muy pequeñita y el pimiento en tiras. Pelar las patatas y cortarlas a trocitos.
Hacer un picadillo con las avellanas, los ajos, el pan duro y el perejil y reservar.
Sofreír la cebolla y el pimiento y echar los aros de calamar y las patatas.
Añadir el caldo y la carne de las ñoras y dejar hervir 10 minutos. Echar un bote de tomate triturado de medio kilo. Dejar cinco minutos y echar el pescado. A partir de ahora contaremos diez minutos hasta apagar el fuego y cuando queden tres añadiremos las chirlas y los langostinos. En el último minuto echaremos la picada y apagaremos el fuego dejando Infusionar antes de servir.
HISTORIA
‘Tranquils tot s’arreglarà’ (tranquilos todo se arreglará)
Una rajola (azulejo) con esta frase preside el despacho de mi compañero Pepe y no hay más verdad que esta.
Sea lo que sea lo que te preocupa, al final, de una manera o de otra, va a terminar arreglándose.
Para juntarnos a comer sólo faltaba un pagano y, como siempre hay algo que celebrar, los compañeros de la oficina, nos hemos hecho buenos homenajes en su chalet en Llombay.
Pepe es un cocinero ‘de categoría’ como demuestra esta caldereta de la que sólo nos faltó comernos el caldero. Y allí estaba yo, haciendo de pinche, con la cámara en mano y tomando notas con mi libreta. El dice que primero la hacían sólo con pescado, pero que un día pusieron patata y con el sabor del caldo se queda tan buena como si comieras el mismo rape.
Ahora ya no estamos en la misma oficina. Los echo mucho de menos, y, aunque me acostumbro a todo y tengo buenos compañeros, han dejado el listón muy alto, son amigos. Una vez en una empresa, una directora financiera, me ofreció un café. Degustándolo, me dijo que no empiezas a conocer a una persona hasta que no te has tomado 50 cafés con ella.
Debe ser eso, los días que no viajaba compartía con mis compañeros cafés y vida y claro, cuando a los ¿500? cafés añades fideuàs, arroços del senyoret y risas, ese vínculo que se crea, es imposible de romper.
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