INGREDIENTES
Una lámina de hojaldre cuadrada
Una cebolla mediana
Un poco de Mistela o vino dulce PX
Un poco de sal
Una cucharadita de azúcar
Una nuez de mantequilla
Seis cortadas de foie mi cuit
Trufa negra de Aragón para rallar
Queso rallado
PREPARACIÓN TRADICIONAL
Para la cebolla caramelizada (se puede
comprar de bote ya hecha en Mercadona y os ahorráis este paso)
Si no, pelar y cortar la cebolla en palmeritas
y pochar a fuego muy lento en la sartén con la pizca de sal y la mantequilla.
Cuando ha perdido la fuerza, o el ‘orgullo’ (según una expresión de la tele de
Aragón que me encantó), añadir el chorretón de la Mistela o vino dulce y el
azúcar y dejar reducir hasta que se evapore.
Descongelar el hojaldre si es congelado y
extenderlo, dependiendo de la marca cortarle un poco para dejarlo en forma de
rectángulo.
Mojar con un poco de agua los bordes y doblar
sobre sí mismos para formar los bordes.
Colocar la cebolla caramelizada ya fría en
el medio
Espolvorear con el queso rallado no mucho y
pintar los bordes con una yema de huevo para que queden doraditos y hornear a
fuego medio de veinte a treinta minutos vigilando para que no se queme.
Al sacarlo del horno colocar encima el foie
cortado a trocitos y rallar la trufa negra de Aragón.
HISTORIA
Esta es otra versión de las bandas de hojaldre
que nos solucionan un compromiso en un momento y nos hacen quedar de
auténticos chefs. Para un merienda o cena de picoteo te hacen quedar de lujo y
las puedes complementar con la de cebolla caramelizada y queso de cabra y con la
de queso de cabra e higo y con esta base y dejando rienda suelta a tu imaginación…
¿con qué ingredientes las vas a hacer?