INGREDIENTES
90 g de
queso manchego
60 ml
de leche
250g de
queso Quark
50 g de
azúcar
4 láminas
de gelatina
PREPARACION
Hacer
un almíbar a punto de bola fuerte, es decir bastante espeso, e ir pasando por
el los pimientos del piquillo, abriéndolos con cuidado para que no se rompan,
pero que les entre el almíbar por dentro y se caramelicen. Dejarlos dentro del
almíbar fuera del fuego mientras hacemos la masa del queso
Hervir
la leche con el azúcar, añadir el queso rallado y el azúcar y remover hasta que
se deshaga. Poner las láminas de gelatina en agua fría, hidratar.
Escurrir
bien y mezclar con la masa de queso. Dejar entibiar y mezclar con el queso
Quark
Rellenar
los pimientos con el queso y guardar en la nevera mínimo cuatro horas, si se
tiene más prisa, poner al congelador y sacar cuando empezamos a comer, así
quedan como rellenos de semifrío de queso.
HISTORIA
Cuando
estuvimos en Aranda de Duero, lo que más nos llamó la atención fue que para postre nos dieran pimientos.
Lo
recordábamos siempre, por eso cuando después de muchos años volvimos, buscamos
el mismo sitio para comer, por el lechazo y por el vino, pero sobre todo por el
postre. Sobre haber ido adrede cuando llegó la hora de pedir el postre no
podíamos más, pero no podíamos dejar de pedirlo y nos pareció fabuloso, como la
anterior vez..
Quería
haberlo hecho, pero siempre que compraba los pimientos, acababa gastándolos en
otra cosa antes de poder preparar la receta, que por otra parte me he inventado
bastante, le iba a poner claras de huevo a punto de nieve, pero me quedé sin
huevos y así nos ha encantado. Queda un poco granuloso, porque el queso
manchego no se funde del todo. Se pude
hacer igual con uno tierno que funda bien.