INGREDIENTES
Corteza de naranja
PREPARACION
Pelar las naranjas con el pela patatas,
quitar toda la piel de una cogiendo lo menos posible de parte blanca y dejar
secar.
Picar con la Thermomix o un molinillo de café hasta reducir a polvo.
Conservar en un bote de cristal.
Sirve para aromatizar pasteles,
magdalenas, para dar un toque cítrico a alguna salsa, o para usar en los gin –tonics que tan de moda están, aunque en
este último caso no molerlas tanto, dejarlas a trocitos pequeños.
HISTORIA
Hay un recuerdo de mi niñez que mi
padre ha inmortalizado en un cuadro que he puesto en el office de la cocina.
Es el de pieles de naranja secándose al
sol.
Mis abuelos no desperdiciaban nada. No
se estilaba ser ecologista como ahora, pero cuando se han pasado estrecheces,
las cosas adquieren otro valor.
Por las noches mi abuelo pelaba la
fruta para él y para mi abuela. En cada época la fruta de temporada, por
supuesto, en la época de las naranjas no había mucha más variedad. Pelaba las
naranjas separando toda la piel de una, conservándola en una tira.
Las tiras de naranja no se tiraban, las
dejaba colgadas hasta que se secaban por completo y entonces, bien secas, las
usaban para encender el fuego cuando los domingos hacían paella a leña.
Hace unos años vi una foto en el blog
de mi compañero Jose Manuel Almerich http://almerich.blogspot.com.es/ con la escena de las pieles de naranja que
recordaba de mi niñez. Le pedí permiso para usar su foto y que mi padre me
pintara el cuadro de las pieles de naranja secándose al sol, e inmediatamente
accedió.
Este año pensé en aprovechar la piel de
las naranjas para aromatizar el azúcar y empecé a pelar algunas con el
pelapatatas y a dejar secar.
También pelé otras como lo hacía mi
abuelo, dejando toda la piel en una tira
y las dejé secando en mi ventana.
Los vecinos van a creer que estoy
loca, pero me daba ilusión encender la estufa de Manzanera estas Pascuas con
ellas, como encendían mis abuelos el fuego para hacer la paella. Así lo hicimos y bueno, no hay color, cuesta bastante, claro que en su época no habían pastillitas blancas de encendido. Tenemos una vida bastante más cómoda que nuestros abuelos en todos los aspectos...
Qué curioso el truco... No lo conocía, aunque tiene mucho sentido... no voy a encontrar esencia más pura, económica y sana... Gracias por compartir!
ResponderEliminarMe encanta esta entrada, en casa la seco a rodajas para decorar, y en una ocasión lo hicimos asi para mezclar con un azúcar, es genial! y super práctico, muchos besos y feliz semana
ResponderEliminarSilvia